Yanine Quiroz, periodista ambiental, miembro de la Red Mexicana de Periodistas de Ciencia
Una serie de entrevistas ciudadanas reveló algunos de los principales problemas ambientales que viven los habitantes de siete localidades de Quintana Roo, y las soluciones que proponen. Los resultados son parte del método de Exposición Ciudadana, que incluye entrevistas a la población y una exposición de carteles con sus fotografías y percepciones. Se realizó gracias a un marco de cooperación entre Alemania y México.
Quintana Roo alberga varios de los ecosistemas más ricos en diversidad biológica del Caribe Mexicano, pero también enfrenta varios problemas ambientales. Durante febrero a agosto de 2022, sus habitantes participaron en un conjunto de entrevistas ciudadanas y foros para hablar de cuáles son esos problemas y, sobre todo, para proponer soluciones que involucren tanto a la ciudadanía como a tomadores locales de decisión.
Estas actividades son parte de Exposición Ciudadana, un método de participación ciudadana que tuvo como objetivo entrelazar a la ciudadanía con las autoridades y otros sectores de la región para buscar soluciones para la conservación de los ecosistemas y servicios ecosistémicos de las zonas marino-costeras de Quintana Roo.
“Para mí es una buena iniciativa, que se acerquen a la gente, al pueblo, porque es al final de cuentas quien vive todo esto. Es necesario saber qué opinan, puede ser que conozcan o no un tema, pero eso brinda un parámetro para saber hacia dónde ir, como si fuera un diagnóstico ciudadano”, dice Víctor Manuel Valencia, docente de un bachillerato en la capital Chetumal, quien fue uno de los ciudadanos entrevistados.
Las entrevistas tomaron en cuenta a ciudadanos diversos, como pescadores, buzos, prestadores de servicios turísticos, docentes, investigadores, activistas, ONG’s y servidores públicos de siete localidades de Quintana Roo: Isla Mujeres, Playa del Carmen, Cozumel, Felipe Carrillo Puerto, Tulum, Mahahual y Chetumal.
Rubí Esmeralda Cruz tiene 18 años, fue una de las 18 personas voluntarias que participaron como entrevistadoras en la Exposición ciudadana. “Con este trabajo podemos saber el punto de vista de cada ciudadano sobre qué problemáticas están sucediendo, así podemos observar que no solo tenemos un impacto en un sitio, sino que suceden en varios lugares pero no nos damos cuenta”, menciona la joven, quien se dedica a hacer buceo y limpieza del fondo marino y, que junto a las demás personas voluntarias de este proyecto, fue capacitada para poder hacer entrevistas a personas de su localidad.
Exposición Ciudadana fue impulsada por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) en colaboración con la Cooperación Alemana al Desarrollo Sustentable en México (GIZ), e implementada por Oceanus, Organización Civil dedicada a la conservación de arrecifes de coral.
La importancia de conservar el Caribe mexicano
El Caribe Mexicano es una de las regiones con mayor diversidad biológica del país, pues alberga diferentes ecosistemas marino-costeros: desde selvas, playas y dunas hasta manglares y arrecifes.
Quintana Roo tiene 20 Áreas Naturales Protegidas marino-costeras, como el Área de Protección de Flora y Fauna Manglares de Nichupté, las Reservas de la Biosfera de Sian Ka’an y Banco Chinchorro, y los Parques Nacionales Arrecifes de Cozumel e Isla Contoy.
Por ello, la GIZ tiene un interés de colaborar con el Gobierno mexicano para cumplir con los objetivos de la agenda ambiental e internacional a través de acompañamiento y asesoría técnica.
“Esta región es uno de los puntos de mucha importancia para el Gobierno mexicano y alemán, por ello GIZ apoya la conservación de estos ecosistemas en México”, cuenta Lizbeth Meza, asesora técnica del proyecto de Conservación de los Servicios Ecosistémicos de las Zonas Marino-Costeras del Caribe Mexicano de GIZ.
Desde su perspectiva, “uno de los principales resultados de Exposición Ciudadana que se tiene que gestar es que la ciudadanía se dé cuenta de la corresponsabilidad que tienen junto con las autoridades para solucionar los problemas ambientales que se les presentan. Sobre todo porque su participación es un derecho y una responsabilidad social”, afirma Lizbeth Meza.
Percepción regional
Luego de entrevistar a 350 ciudadanos y 72 actores de gobierno de las siete localidades de Quintana Roo, el equipo de jóvenes voluntarios y de coordinadoras de Oceanus analizó la información, con la cual elaboraron gráficas para saber qué problemas y soluciones fueron las más mencionadas en cada localidad.
“Los principales problemas ambientales mencionados fueron la contaminación, el crecimiento desmedido y mal planeado, la pérdida de ecosistemas y el mal manejo de residuos”, compartió Gabriela Nava, cofundadora y directora ejecutiva de Oceanus.
En menor proporción, se mencionó al cambio climático, los grandes proyectos y el sargazo, pues son considerados por los ciudadanos como temas a los que difícilmente pueden incidir.
La metodología les permitió tener datos sobre las diferencias entre dos zonas de Quintana Roo. Las localidades del norte (Isla Mujeres, Playa del Carmen y Cozumel) comparten problemas como el crecimiento desmedido y desarrollo mal planeado, mal manejo de residuos y pérdida de ecosistemas; mientras en el sur (Felipe Carrillo Puerto, Tulum, Mahahual y Chetumal) una de las problemáticas es la basura y contaminación, en menor proporción el crecimiento desmedido y la pérdida de ecosistemas, aunque también hablaron de la falta de aplicación de normas y de educación ambiental.
Gabriela Nava añadió que hay más desconocimiento de la importancia de recursos naturales y ecosistemas marino-costeros en la parte centro-sur del estado, quizá porque la población no se siente tan relacionada con ellos.
Las soluciones desde las localidades
La Isla de Cozumel está rodeada de una barrera arrecifal que da hogar a un gran número de peces, tortugas, mamíferos marinos, y tiene una gran extensión de manglar. Este lugar es un ejemplo de acción colectiva, pues los pobladores junto con el gobierno, prestadores de servicios turísticos y restauranteros lograron controlar al pez león, una especie invasora que devoraba varias especies nativas de sus icónicas aguas.
Desde la perspectiva ciudadana, las dos principales problemáticas que les aquejan en la isla son la pérdida o degradación de hábitat ya sea por turismo masivo o malas prácticas en la naturaleza, el sargazo, y el desarrollo urbano no sostenible.
“Las soluciones que proponen los 63 ciudadanos entrevistados son hacer hincapié en aplicar la normatividad y legislación para regular el desarrollo, que se tome en cuenta la información de la academia para crear políticas públicas, impulsar la educación ambiental e institucionalizar las acciones ambientales que ya se llevan a cabo por la comunidad”, dice Paulina Saucedo, coordinadora de Oceanus en Cozumel.
Una de las riquezas de Exposición Ciudadana es que permite ver qué propuestas e ideas tiene la gente en la diversidad del territorio quintanarroense.
80 kilómetros al suroeste de Cozumel, ya en el continente, se encuentra Tulum, un municipio con ecosistemas de selva y costas ricas en diversidad biológica que también ha sufrido el efecto del crecimiento y turismo no sostenible, y que fue uno de los siete municipios incluidos en este proyecto.
En Tulum se encontraron dos principales problemáticas. La primera fue la contaminación, por lo que los ciudadanos propusieron un manejo integral de residuos, impulsar un turismo sustentable y hacer actividades de limpieza comunitaria.
La segunda fue la destrucción de hábitats y crecimiento desmedido, ante lo que pidieron consolidar un ordenamiento ecológico participativo, restringir construcciones masivas, vigilar las construcciones en dunas costeras y manglares y cero tolerancia a la corrupción. Para lograrlo, enfatizaron la importancia de la educación ambiental y la difusión, indicó Karla Infante, coordinadora de Oceanus en Tulum.
Los siguientes pasos
A partir de las entrevistas a la ciudadanía se crearon carteles con sus fotos y frases más importantes acerca de los problemas y soluciones para las siete localidades del proyecto. La última fase de la Exposición Ciudadana consistió en presentar los carteles en exposiciones abiertas al público en recintos culturales de Isla Mujeres, Playa del Carmen, Cozumel, Felipe Carrillo Puerto, Tulum, Mahahual y Chetumal.
En la Casa de la Cultura de Felipe Carrillo Puerto, Leo Texocotitla recorre los carteles que integran la Exposición Ciudadana. Cuenta que ahora, al verlos, le parece llamativo los temas ambientales que se abordan en ellos. “Me parecen muy interesantes, de hecho me dan muchas ideas de qué cosas podríamos hacer ante las diversas problemáticas de la zona. Al ver los distintos puntos de vista de las personas yo puedo intentar generar mi propio criterio”, refiere el joven.
El espacio y momento que le dieron a los ciudadanos en todo el proceso, desde acercarse a hacerles entrevistas hasta ver los resultados de la exposición brindó una ventana a soluciones ambientales, sociales y económicas. “Vimos gran respuesta de actores que tienen interés en hacer comunidad, ser ciudadanos y escuchar. Ha sido interesante que las personas adopten cambios pero desde la perspectiva ciudadana, tú como ciudadano ¿qué podrías lograr?, y si eres actor social, ¿cómo puedo contribuir a un gran cambio desde mi ciudadanía?”, comparte Paulina Saucedo, coordinadora de Oceanus en Cozumel.
Para ella, el hecho de que las personas conversen entre sí y que las autoridades les escuchen, ya son tres pasos adelante hacia la conservación del Caribe Mexicano pues la población se siente involucrada.
Durante las exposiciones, la comunidad podía ver los carteles, escuchar la presentación del proyecto y los resultados, participar en mesas para proponer soluciones a problemas concretos como la contaminación del agua o la pérdida de ecosistemas. Se votaron distintos mecanismos para poder lograr las soluciones, entre ellos mesas técnicas (con autoridades), mesas ciudadanas y foros virtuales. Finalmente las personas podían intercambiar experiencias y propuestas de acción.
“Con las soluciones que se proponen y los mecanismos que se votan, la intención es que en estos foros se genere diálogo real entre actores y se asuman compromisos de seguimiento de mecanismos e incluso la creación de puntos focales para coordinar las acciones”, afirma Lizbeth Meza.
La representante de GIZ explicó que la Exposición Ciudadana no implementa cada solución propuesta, sino más bien facilita la participación ciudadana e impulsa el envío de las respuestas ciudadanas a las autoridades competentes. “Hay trabajo de gabinete y cabildeo a nivel municipal que la Conanp tiene que hacer en el marco del proyecto y en los foros adecuados” menciona Meza, añadiendo que en el caso de Tulum se podría intentar empujar procesos de planificación territorial donde se tomen en cuenta estos resultados.
José Juan Domínguez, director del Área Natural Protegida Reserva de la Biosfera Caribe Mexicano, mencionó que aunque la Conanp tiene mecanismos de consulta pública, esta es la primera vez que se realizan entrevistas principalmente a ciudadanos en la región. “Nos da un panorama de lo que le está preocupando a la sociedad. Es una oportunidad de llevar la participación social a un nivel de mayor compromiso y los resultados nos van a servir para buscar soluciones, en las distintas atribuciones de cada autoridad”.
El funcionario añade que en relación con el manejo de Áreas Naturales Protegidas en Quintana Roo, van a ver la manera en que la Conanp rediseñe o reoriente sus estrategias para atender las problemáticas identificadas. Y también van a socializar los resultados con otras autoridades y órdenes de gobierno, con el fin de que puedan atender esas problemáticas percibidas por la ciudadanía, a partir de crear acciones o alinear programas.
“Para mí la naturaleza representa todo, gran parte de mi vida la viví cerca del monte y el mar. Yo hago ciclismo de montaña y siempre estamos conectados con la naturaleza, por eso es importante la conservación de estos lugares. Me parece innovador este proyecto, porque escuchan a los afectados. Yo le pido a los gobiernos que se apeguen y apliquen las leyes, y a los ciudadanos que nos involucremos más y seamos más vigilantes de nuestros ecosistemas”, enfatiza William León, ciudadano de Chetumal.